
Estos son los malos hábitos de las madres más comunes
Aunque lo veas como algo normal, algunas de nuestras acciones pueden ser tomadas como malos hábitos de las madres, así que si los notas en ti, comienza a trabajar para deshacerte de ellos y no darles malos ejemplos a tus hijos:
- Hablar mal de otras personas. Seguro, aunque seas la persona más políticamente correcta, haz hablado mal de alguien alguna vez; pero aguas si lo haces muy seguido y más si lo haces frente a tus hijos. Recuerda que los niños aprenden con el ejemplo, así que si tú lo haces, ellos creerán que es algo que pueden y deben hacer.
- Decir mentiras. Al igual que el punto anterior, es algo que todo el mundo ha hecho, pero no por que todos lo haga, quiere decir que está bien; evita decir mentiras o pedirle a tus hijos que mientan por ti, incluso si son mentiras pequeñas, ¿no querrás que tus hijos comiencen a mentir a diestra y siniestra, verdad?
- Pelear o discutir. Nuestro temperamento y personalidad define quienes somos y, aunque hay personas con un carácter más fuerte que otras, definitivamente no está bien «armar un pleito» por cosas diminutas; por ejemplo, cuando el automóvil de enfrente no avanza (incluso cuando sigue la luz roja). Recuerda que debes mantenerte ecuánime ante las situaciones difíciles; así les enseñas a tus hijos que el mejor camino es el diálogo y no la violencia.
- Flojear o dejar todo al último. Nunca falta el día en que estuviste hecha loca porque fuiste a la oficina, ayudaste a los niños con la tarea, te tocó cocinar la cena y debías terminar un reporte para el día siguiente; el resultado: no escuchaste la alarma la mañana siguiente y a todos se les hizo tarde para la escuela y la oficina. No pasa nada si esto sucede una vez, pero si te pasa muy seguido, debes saber que padeces uno de los malos hábitos de las madres más comunes. Procura organizar mejor tus tiempos para que no te agarren las prisas y enseña a tus pequeños que cumplir y trabajar fuerte, es una gran carta de presentación que les abrirá muchas puertas.
- No cumplir con tus obligaciones cívicas. Pagar todos los servicios de manera puntual, no cruzar la calle por las esquinas y respetar a todos por igual, son actitudes cívicas con las que todos debemos ser responsables y cumplidos. Por ejemplo, todos los automovilistas sabemos que tener asegurado nuestro vehículo es de carácter obligatorio y, si aún no cumples con esta determinación, el seguro por kilómetro recorrido de miituo te ayudará con ello, porque además de cuidar tu auto, ahorras. Si contratas tu póliza de seguro por kilómetro recorrido de miituo, cumples con tu obligación y le demuestras a tu familia que eres una jefa de familia que no tiene los famosos malos hábitos de las madres.
¿Estás dispuesta a cambiar tus costumbres y convertirte en la mejor mamá?
